El Arzobispado de Santiago de Compostela y la Asociación Raiña, y también en su nombre la empresa de Inserción Primicias Raiña, firmaron, hoy martes 7 de mayo en la sala de juntas de la Curia diocesana, un convenio mediante el cual el primero hace una cesión de la Casa Rectoral de Nuestra Señora de Curtis.
Se trata de un inmueble que se cede durante un periodo de tiempo para poder rehabilitarla y así dar respuesta a una necesidad urgente, que es la situación en la que viven muchas personas sin techo, personas en situación difícil, personas que están acogidas en la Asociación en este momento.
Este convenio fue suscrito por el ecónomo diocesano, Fernando Barros, y por el presidente de la Asociación Víctor Naveira, quien mostró su agradecimiento: “es un modo de dar testimonio, de caridad y también un modo de dar utilidad y a los bienes patrimoniales con los que cuenta la iglesia. Estamos de verdad agradecidos”.
