En la tarde de hoy, 2 de febrero, festividad litúrgica de la Presentación del Señor en el Templo, los religiosos celebran la Jornada Mundial de la Vida Consagrada, una cita anual en la que se reúnen para dar gracias a Dios por el don de su vocación consagrada y para renovar sus votos evangélicos.
Con este motivo a las 18:00 horas, se celebró una Eucaristía en la compostelana iglesia de las Huérfanas, presidida por el arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio.
En esta jornada la Iglesia celebra la XXVII Jornada Mundial de la Vida consagrada, cuyo lema, en esta ocasión, es “Caminando en esperanza”, y en la que mons. Julián Barrio ha dirigido una Carta Pastoral a los Miembros de la Vida Consagrada.