Monseñor Barrio presidirá la Eucaristía del Miércoles de Ceniza en la Iglesia de Santa María Salomé

  • La ceremonia se desarrollará a partir de las 19:00 horas de este día 26 de febrero
  • En su Carta Pastoral para la Cuaresma recuerda la importancia de la limosna como  “forma de compartir con caridad los bienes con los necesitados y que nos hace más humanos”

Este miércoles día 26 de febrero comienza el tiempo litúrgico de la Cuaresma. Con la imposición de la ceniza, la Iglesia inicia los 40 días en los que llama a los fieles a la conversión y a prepararse verdaderamente para vivir los misterios de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo en la Semana Santa. Así lo recuerda el arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio en su Carta Pastoral para esta Cuaresma, en la que invita a los diocesanos a atender la llamada a la conversión, reconociendo la propias limitaciones y pecados y acogiéndose a la misericordia de Dios. El arzobispo alude además a la importancia de la limosna, “que es una forma de compartir con caridad los bienes con los necesitados y que nos hace más humanos”. Monseñor Barrio presidirá la Eucaristía de este Miércoles de Ceniza en la Iglesia de Santa María Salomé a las 19:00 horas.

Como se sabe, la Cuaresma es ese tiempo fuerte del año litúrgico que a lo largo de 40 días prepara a los cristianos al “Triduo Pascual en el que celebramos este misterio, núcleo de la fe cristiana, en el que se manifiesta que para el cristiano la vida es Cristo”, tal y como indica monseñor Barrio en su carta pastoral. En esta jornada inicial de la Cuaresma, la Iglesia bendice e impone en la frente de los fieles la ceniza hecha de las palmas bendecidas en el Domingo de Ramos del año anterior, como un signo y llamada a la conversión, al ayuno, a la oración y a la limosna. El Miércoles de Ceniza es un día en el que es obligatorio el ayuno y la abstinencia, tal y como también se establece para el Viernes Santo, para los mayores de 18 años y menores de 60. Fuera de esos límites es opcional. La abstinencia de comer carne es obligatoria desde los 14 años. Todos los viernes de Cuaresma también son de abstinencia obligatoria.

Intensa agenda del arzobispo al inicio de la Cuaresma

Al inicio de esta Cuaresma, monseñor Barrio tendrá una intensa agenda pastoral. El mismo Miércoles de Ceniza, por la mañana presidirá un retiro para los sacerdotes de la Vicaría de Pontevedra y por la tarde la Eucaristía en la compostelana Iglesia de Santa María Salomé. Al día siguiente dirigirá un retiro a los sacerdotes de la Vicaría de Santiago y el viernes hará lo propio con los sacerdotes de la Vicaría de A Coruña. Ya el sábado día 29 participará en la primera sesión del Sínodo de Jóvenes que se desarrollará en el Seminario Menor de Santiago desde las 11:00 horas.

Por su parte, el obispo auxiliar presidirá sendas Eucaristías en las que se impondrá la ceniza en Chacín, a las 12:00 horas, y en Serra de Outes a las 18:00 horas de este miércoles.

En su carta pastoral, monseñor Barrio indica que “necesitamos que Dios nos vista con la túnica de su gracia al volver como el hijo pródigo a la casa del Padre. “Dios no se cansa nunca de perdonar, somos nosotros los que nos cansamos de acudir a su misericordia”. Para ello es necesario entrar dentro de nosotros mismos y ver dónde nos encontramos, intensificar la oración, escuchar la Palabra de Dios y estar vigilantes con el oído a la puerta para que cuando el Señor venga y llame nos encuentre bien despiertos con la lámpara de nuestra fe encendida. Salir al encuentro de Cristo conlleva encontrarse con los demás en los que vemos las llagas de su pasión, “presentes en las nuevas víctimas inocentes de las guerras, los abusos contra la vida, de las múltiples formas de violencia, de los desastres medioambientales, de la distribución injusta de los bienes de la tierra, de la trata de personas en todas sus formas y de la sed desenfrenada de ganancias, que es una forma de idolatría”, recordando así el mensaje del papa Francisco para esta Cuaresma de 2020.

El arzobispo, igualmente, invita a todos a celebrar las “24 horas para el Señor, que tendrán lugar el viernes 20 y el sábado 21 de marzo, dejándonos guiar por las palabras de Jesús a la pecadora: “Tus pecados te son perdonados” (Lc 7,48). En la adoración eucarística encontramos también el ambiente propicio para celebrar el Sacramento de la Reconciliación cuya experiencia nos lleva a ser misericordiosos con los demás. Ruego que en las parroquias, en las comunidades religiosas y en nuestros Seminarios se programen momentos de adoración al Santísimo, lectura de la Palabra de Dios y celebraciones penitenciales en el contexto de esta celebración”.