Pastoral de la Salud recuerda que las capellanías de los hospitales siguen atendiendo a quienes lo demandan

  • El Centro de Escucha San Camilo de Pontevedra, operativo telefónicamente y por email para acompañar en el duelo

El coronavirus ha modificado nuestras costumbres y restringido nuestra libertad de movimientos, un escenario ante el cual mantener el contacto y la cercanía con los fieles supone todo un reto para la Iglesia que peregrina en Santiago de Compostela.

Muchas parroquias ante la situación que nos toca vivir, han puesto en marcha iniciativas encaminadas a ofrecer apoyo espiritual, atención y acompañamiento a personas enfermas y mayores. Por este motivo, los párrocos y sus colaboradores, muchos de ellos miembros de la pastoral de la salud, se han esforzado en habilitar un teléfono de contacto, un correo electrónico o un número de whatsapp que permita una mayor cercanía.

En el ámbito sociosanitario, es de destacar la entrega y generosidad de las órdenes religiosas que atienden con tanto cariño a mayores y discapacitados.

En el ámbito hospitalario, los capellanes tienen estos días una importante misión en el acompañamiento y consuelo a personas ingresadas y a los profesionales de la salud para que se puedan desahogar ante situaciones tan duras que les toca vivir y encontrar una palabra que les aporte Esperanza.

Las capillas de los hospitales siguen abiertas.  Siguiendo las indicaciones de nuestros Obispos no se celebra en estos momentos de forma pública la Eucaristía , pero es posible permanecer en ellas haciendo un rato de oración cumpliendo una serie de medidas: higiene de manos, no tocar las imágenes y guardar una distancia mínima de dos metros si se coincide con otra persona.

En todos los hospitales el servicio religioso funciona normalmente, aunque los capellanes tienen limitaciones para moverse libremente por los pasillos y por determinadas unidades que han sido bloqueadas por necesidades sanitarias. Por este motivo, si alguna persona necesita atención religiosa y espiritual debe contactar con la capellanía a través de la centralita o de los controles de enfermería del centro. En caso de que fuese imprescindible, los capellanes podrían visitar al enfermo aislado siguiendo las indicaciones del personal de enfermería: bata, mascarilla, guantes, y gafas.

Los capellanes y el personal sanitario advierten que “una de las cosas más duras” es ver fallecer a personas que no pueden estar acompañadas por sus familias por miedo a posibles contagios. Se trata de situaciones muy dolorosas para todos los seres queridos que sufren en la distancia la pérdida de padres, abuelos, amigos…El dolor se intensifica porque ni siquiera pueden velarle y los familiares tampoco pueden recibir el abrazo de consuelo de su entorno por estar confinados en casa. Ante estas situaciones que con el paso del tiempo serán cada vez más visibles, se recuerda la existencia del Centro de Escucha San Camilo de Pontevedra con el que se puede contactar a través del teléfono: 652385332 y por el correo electrónico: centrodeescuchapontevedra@gmail.com