- La Eucaristía se celebró en la Capilla del Seminario Mayor y contó con la presencia del Vicario General, del Vicario de Pastoral, del rector, formadores y seminaristas.
El Seminario Mayor de Santiago de Compostela celebra estos días, la festividad de San Martín de Tours, patrono de la institución formativa y educativa. Con el rezo de las Primeras Vísperas Solemnes de San Martín en la Capilla del Seminario Mayor, ayer jueves a partir de las 20:00 horas, dieron comienzo las celebraciones litúrgicas en honor del patrón del Seminario.
Hoy viernes, a partir de las 13:00 horas, el arzobispo de Santiago, monseñor Francisco Prieto, presidió la Solemne Eucaristía en la Capilla del Seminario Mayor. En la homilía, destacó que la imagen de aquel soldado que parte la mitad de la capa que le correspondía, porque la otra mitad pertenecía al ejército de Roma: “es un gesto significativo, y que quizás una vez más nos recuerda por sí mismo que somos cada uno de nosotros una vida que no se parte y no se comparte, es una vida que se hace inútil“. Y añadió: “la vida que no se da y que no se entrega, es una vida que suele acabar encerrada cómodamente, justificada y excusada, seguramente nos puede pasar a todos”.
D. Francisco afirmó que “el Señor pone en nosotros su fuerza y su gracia aunque el tesoro, (…) sabemos que lo llevamos en vasijas de barro. Pero no olvidemos que esa opción que el Señor pone en cada uno de nosotros, es para que nuestra vida sea un salir al camino”.
Mons. Prieto afirmó también, parafraseando a Zubiri, que “cuando atentamos contra la verdad, cuando matamos la verdad, atentamos y matamos al hombre (…). Seamos ministros de esa verdad que salva, seamos servidores de esa verdad en la que somos ungidos para ser testigos de una palabra, esta sí definitiva. Sirvamos a la verdad sin miedo”. Y continuó diciendo que “la vida de cualquiera, de cada uno de nosotros, en cualquiera de los ámbitos en que ejercemos nuestras responsabilidades en la sociedad, en la familia, entre amigos y compañeros con los cercanos y los ocasionales, ahí prestamos lo que somos lo que somos cada uno de nosotros, ungidos para ser testigos de la buena nueva“.
Terminó su homilía con las palabras de Benedicto XVI cuando hablaba de San Martín de Tours: “el gesto de partir la capa con el mendigo, era una expresión de Jesús mismo, que multiplicando los panes, multiplicó precisamente la vida que tenía que ser compartida, anticipo de la mesa de la Eucaristía, donde ahora pondremos encima de ella las ofrendas de pan y vino, que serán Cuerpo partido y Sangre derramada. He ahí donde alimentamos y tenemos que nutrir nuestra vida”.
La festividad de San Martín de Tours reunió a toda la comunidad de seminaristas del Seminario Mayor, con Carlos Álvarez, el rector, a la cabeza; así como a buena parte de los integrantes de las comunidades educativas diocesanas, tanto el Instituto Teológico Compostelano (ITC) como el Instituto Superior Compostelano de Ciencias Religiosas (ISCCR), así como autoridades civiles y militares. Acompañaban a monseñor Prieto, el Vicario General, José Andrés Fernández Farto y el Vicario de Pastoral, Francisco Javier Porro, el Vicario Territorial de Santiago, Juan González-Redondo Neira, el Deán de la Catedral, José Fernández Lago, entre otros sacerdotes.
