Esta semana, el arzobispo de Santiago de Compostela, mons. Franscisco Prieto, recibió a mons. Diamantino Antunes, obispo de Tete, Mozambique, y a Cayetano Chenel Ria, maestro de Educación Infantil y voluntario en misiones en Mozambique.
Mons. Diamantino, natural de Portugal, comenzó su labor misionera en Mozambique, en la zona de Maúa, en el norte del país, en 1992, antes de ser ordenado sacerdote. Su nombramiento como obispo se hiciera público un 22 de marzo tiene un especial significado para este misionero porque fue precisamente en esa fecha, cuando tuvo lugar el martirio de los catequistas de Guiúa, en 1992. Su causa de beatificación la ha llevado como postulador el padre Diamantino estos años
Palabras de Cayetano Chenel Ria: