Este jueves 18 de abril, el Arzobispo de Santiago, monseñor Francisco Prieto, se desplazó a Oleiros para tener un encuentro con el alumnado de infantil, primaria, secundaria y profesorado del colegio A Milagrosa Josefa Sobrido de Oleiros-Ribeira.
Durante la jornada, la comunidad educativa invitó al arzobispo a plantar un olivo en el huerto del centro educativo, como símbolo de la paz, sabiduría y esperanza. El equipo directivo quiso así hacer una analogía con “el crecimiento lento y paciente, y lo elegimos como representación de nuestros alumnos, que entran con tres años y salen con dieciséis”.
